Lucio Anneo Séneca
Nunca creas feliz a nadie que esté pendiente de la felicidad. Se apoya en una base frágil quien pone su alegría en lo adventicio: el goce que viene de fuera, afuera se irá. Por el contrario, aquel que nace de uno mismo es fiel y firme, y crece, y nos acompaña hasta el fin.
Más del autor: Lucio Anneo Seneca